José Ozaki es un chef que no se queda tranquilo. No siendo suficiente con Piso Uno y Republica Nikkei, rellena su apretada agenda con Distrito Nikkei, su último proyecto de cocina asiática. Abierto hace dos meses, se trata de una propuesta más ligera e informal; comida de paso, comida de mercado, pero con el mismo sabor potente de ingredientes auténticos.
Ubicado en el galpón sur-oriente de Franklin con San Isidro, al fondo del patio de comidas, se asoman tímidamente sus carteles de ofertas de ramen y pollo teriyaki. El barrio es cotizado, y la competencia es diversa, pero no hay nada como lo que propone Ozaki, por lo que es cuestión de tiempo para que Distrito Nikkei ostente un lugar más amplio y vistoso.
Para el Ramen, ese caldo que requiere varias horas para concentrar aromas y sabores, emplean un caldo tradicional para su versión de pollo y de cerdo, y un caldo de hongos para la opción vegetariana, con tofu frito (si le gusta sin freír adviértalo previamente), pasta, verduras, huevo duro y sésamo ($3.900). Reponedor hasta la última gota.
Nuestro favorito, el Pollo frito agridulce, llega salteado en una salsa levemente picante de tomates y especias, acompañado de papas fritas; mientras que el Tonkatsu, tiras de carne de cerdo apanadas en panko, vienen servidas con rodajas de berenjenas fritas rebosadas en batido, donde unas gotitas de limón maridan increíble (ambos, como todos sus platos, a $3.900). Con esto, una carta reducida pero precisa.
Próximamente incorporarán en su oferta un menú Teishoku – en japonés se refiere a una comida completa -, que incluiría sopa miso, verduras, arroz y la proteína animal o vegetal (tofu). Atrévanse a preguntar si hay algo nuevo, porque en una cocina en construcción, siempre hay algo que no aparece ni en carteles ni en menús.
Abierto fines de semanas y festivos, cuando el barrio está en su esplendor, de 12.30 a 17.00 hrs.
Distrito Nikkei
San Isidro 2208, Santiago,
@distritonikkei
Fotografía: Francisca Rivera