
Ubicado frente a su bar hermano, Gracielo, este ondero lugar abrió a principios de septiembre para ofrecer coctelería de autor y reversionada, más una carta de comida pensada en compartir.
Una casona blanca, de fachada discreta, es la antesala de Guachita Culebra, este nuevo bar que cuenta con una gran terraza interior al aire libre, rodeadas de plantas, y una barra protagonista al fondo, combinación que da origen a un atractivo spot, el cual es toda una sorpresa cuando se pasa el umbral.
Este proyecto abrió sus puertas a principios de septiembre justamente frente a su hermano, Gracielo, es decir, en la escondida calle General Flores, en Providencia, que poco tiene de discreta, pues ya alberga a otros bares de renombre en la escena santiaguina, como Prima y La Virgen.

Guachita Culebra, nombre en honor a la abuela de los socios, cuenta con una barra que se mueve intensamente, pues desde allí no solo sale coctelería clásica y reversionada, sino también de autor, una propuesta que en un principio fue creada por el bartender José Nuñez y que luego Simönna Van Dört (ex Bar La Providencia) ayudó a ponerla en onda con la identidad del lugar.
“Estudié mucho sobre tipos de serpientes, venenos, hábitat y cómo podía relacionar ingredientes con sus orígenes, ya que quería que la carta no solo fuera inspirada en reptiles y la abuela de los chicos, si no que tuviera esa magia, que una pequeña historia quedará grabada. De hecho, de ahí viene el buscar leyendas e investigar tanto, para que cada cóctel tuviera una historia como si tu abuela te la contara y cada cosa una relación del por qué y no solo crear coctelería al azar”, nos explica Simönna.

Es así como acá te encuentras con Anaconda, de personalidad maderosa, pero a la vez fresco y algo tropical, que va con Jack Daniel’s N7, aguamiel, jugo de papaya y bitter Angostura, mientras que uno de sus hits es Reina Shahmaran, pues llama la atención desde lejos porque una culebra va enroscada al copón que contiene Aperol, vodka, jarabe de damasco casero, tabasco, jugo de naranja y algo de merkén, logrando una receta de impronta cítrica, de dulzor sutil y elegante picor.
En las reinterpretaciones está Cobra Real, que es la mirada del clásico Penicillin, por lo que tiene una buena dosis de picor en equilibrio con un dulzor algo más marcado gracias a la piña y el aguamiel, que se combina con la dosis de whiskey Grant’s, jengibre y limón.

Otro es Cascabel, que vendría siendo una reversión del Negroni, por lo que va con gin, Campari, vermú dry, jugo de naranja, y syrup de frutilla, que le da un toque más amable, pero sin perder potencia, amargor ni su impronta seca, lo que lo convierte en un must de quienes se están adentrando en el mundo de este brebaje.
En tanto, la cocina cuenta con una carta acotada, pero muy ad hoc al formato, ya que está pensada, en gran parte, para compartir. Por lo mismo, las porciones suelen ser generosas. Una de ellas es Hummus y popurrí, es decir, la receta en base a garbanzo, pero en una versión 2.0, pues va con setas en una reducción de vino tinto, que aporta profundidad a esta sabrosa preparación, vegetales asados, semillas de zapallo, que le dan algo de crunchie, y cilantro para refrescar. Acompañan unas tostadas, ideales para untar.

En el formato tabla está Bravo & Marino, que es una selección de productos del mar en diversos formatos: un tradicional ceviche con pescado blanco del día, de buena acidez; un pescado en su punto cubierto por una buena y sabrosa fritura; unas brochetas de camarones apanados; con papas fritas y dos salsas para humectar, tártara y lactonesa. Genial match.
En el mundo de los sánguches la carne roja prima, salvo por la Chicken Burger, que se trata de un pollo apanado acompañado de salsa barbecue, pepinillos y un coleslaw con personalidad.
De todas estas formas es que Guachita Culebra busca seducir y atraer las miradas durante esta temporada, para convertirse en un gran complemento a Gracielo y, con ello, posicionarse como un lugar ondero, pero relajado, donde compartir y disfrutar es la base de su esencia.
Guachita Culebra
General Flores 180, Providencia.
@guachitaculebra