Sus macarones ya son un clásico entre los amantes de esas delicias francesas. Hablamos de Etienne Marcel, la patisserie y salón de té ubicada en un tranquilo barrio de Ñuñoa y que abre su segunda tienda en la calle más francesa que podríamos imaginar: Luis Pasteur!. Ahí ofrecen nuevos productos tras un concepto que han llamado Café Francais, donde además de la variada oferta de deliciosos y perfectos macarrones y sus gloriosos y destacados eclairs, hoy se acoplan a la oferta preparaciones saladas de elaboración propia como sándwiches en pan baguette, croissants, croque-monsieur – típico sándwich en pan de molde con jamón cocido y queso emmental o gruyere, asado al horno o la plancha -, ensaladas, quiches y otras preparaciones elaboradas con productos frescos. Dentro de sus espacios se destaca la cómoda terraza que cuenta con juegos infantiles, compartiendo las instalaciones con la tienda Pichintún, dedicada a la importación de juguetes europeos de altos estándares de calidad en cuanto a su manufactura y materialidad. Entrar en estos rincones es evocar un viaje por París, tanto porque las voces que se oyen son francófonas o porque el lugar rememora las típicas cafeterías francesas. Es un lugar perfecto para disfrutar con niños en estos días de primavera, ya sea como panorama en la semana para tomar un café o como en una distendida mañana de domingo para disfrutar de un brunch. Lo mejor es que el equipo de Etienne Marcel siempre está preocupado de dar una atención especial y una experiencia culinaria de alta calidad.
Etienne Marcel (Vitacura)
Luis Pasteur 5441, Vitacura
Fotografía: VD – El Mercurio