Alejandro Jofré nos presenta su proyecto personal, con uvas poco convencionales provenientes de Itahue, en la zona cordillerana de Molina. Para comenzar, un Rosé color tela de cebolla, muy en línea con los trabajos anteriores de este autor, ex enólogo en jefe de las viñas Maquis y Calcu. Elaborado con un 100% de Garnacha, las uvas fueron cosechadas un poco antes para alcanzar su particular color. Se trata de un rosado muy a la francesa, fresco, con aromas a hojas de tomate, guindas corazón de paloma y algo de fruta oxidada. En boca se percibe una sutil mineralidad salina, que va de la mano a una acidez increíble, muy seco y con buena persistencia. Un vino para el cual un Omelete de Erizos andaría perfecto, a una temperatura que no exceda los 8°c. La misma mano, produce un tinto expresivo, de color violeta, con intensos ribetes fucsia. Una mezcla tinta compuesta de 40%Carignan, 40% Tempranillo y 20% Carmenere, con una adorable nariz, mezcla de berries maduros con cerezas grandes y negras, muy floral, violetas y pimienta rosada. Al pensar en “Vinos Fríos del Año”, uno tiende a imaginar solo vinos livianos, sin embargo, aquí encontramos un tinto con presencia, de tanino joven y firme, con una tremenda acidez. Buena señal de la gran evolución que tendrá este vino. Pruébenlo con carnes rojas, sin escatimar en grasas y no superen los 16°c.
Disponible en la tienda Santiago Wine Club y a través de venta directa en ja.jofre@yahoo.es