Cuando el Carmenere y el Cabernet Franc se abrazan, dan vida a ensamblajes como Viola, un vino elegante y de gran carácter, donde frutas negras conviven felizmente con especias y notas a mentol. Un equilibrio que tiene su origen en los mismos viñedos donde provienen todos los vinos de Maquis: ese singular terroir, entre los ríos Tinguiririca y Chimbarongo, que se ubica en la zona de Palmilla – Valle de Colchagua – y cuyo microclima de temperaturas levemente más bajas al resto del valle, logra imprimir un carácter frutal y de rica acidez en sus vinos. Es así como su jugosa cosecha 2011 – compuesta de un 85% de Carmenere y un 15% de Cabernet Franc -, le da la bienvenida al verano y a muchas de esas delicias chilenas que abundan por estos días. ¿Una idea? Comiencen con un buen pastel de choclo y concluyan con un sabroso costillar de cerdo.
A la venta en tiendas especializadas a un precio de referencia de $ 40.000