Explosivos. Así podemos resumir a estos dos blancos de Arboleda, provenientes del mismo viñedo de 113 hectáreas llamado Chilhué – que en lengua nativa significa “Lugar de Gaviotas” – ubicado a unos 15 kms en línea recta del mar, al nororiente de Concón. Es ahí, entre lomas y colinas de la Cordillera de la Costa – al norte del río Aconcagua – donde se lucen las parras plantadas hace poco más de 10 años por Viña Errázuriz, matriz de Arboleda. Desde entonces han pasado distintas cosechas – como sus tremendos Pinot Noir -, entregando vinos que reflejan de forma honesta, el carácter de su terruño. Arboleda Sauvignon Blanc 2016, primer vino bajo la autoría de su flamante nueva enóloga Emily Faulconer – cuya experiencia incluye Viñedos de Alcohuaz y Maquis -, trae notas a piel de limón y maracuyá, lo que sumado a sus notas a hierba fresca y pimienta verde, reflejan un estilo muy interesante, fresco e intenso. En boca muestra un carácter mineral, chispeante, de rica acidez y que invita a comer. Por su parte, Arboleda Chardonnay 2015, fermentado con levaduras nativas y envejecido por 10 meses en barricas de roble francés, tiene un carácter mezcla de manera perfecta la nueva y la vieja escuela de los Chardonnay chilenos, por un lado, sus notas tropicales, a damasco, membrillo y mantequilla; por otro, la notas minerales y cítricas, resultado no solo de la influencia costera, sino también de su método de vinificación.
A la venta en tiendas La Cav a un precio de referencia de $ 15.590 c/u